Hacia el este de la Avenida San Martín, mas conocida como la avenida de los Plátanos, se encuentra esta plazoleta donde emerge una escultura que simboliza la esencia inmigrante de la región.
La Municipalidad de Colonia Caroya a través de su intendente Gustavo Brandán, puso en valor este espacio tan preciado por sus habitantes.
Colaboraron las restauradoras Laura Pechiutta y Rocío Guardia, quienes, durante varios meses, recuperaron el diseño original de la escultura.
“Hoy tenemos que recordar más que nunca a los fundadores de la Colonia, a los que la hicieron con todo el sacrificio, que dejaron su patria, que vinieron y era todo un desierto, que trajeron el agua, pelearon también contra una pandemia y sin embargo salieron adelante, no hubo nada que los detuviera y pusieron trabajo, trabajo y más trabajo, que era la palabra que conocían, ese tiene que ser el ejemplo para todos nosotros”. destacó Brandán en su discurso de inauguración.
En ese marco, el intendente Anunció el lanzamiento de un Concurso Nacional de Ideas junto al Colegio de Arquitectos para poder llevar adelante la construcción de pórticos de ingreso en tres accesos de la localidad y la construcción de la Oficina de Turismo.
El monumento fue colocado en marzo de 1978 con motivo de conmemorarse los 100 años de la llegada de los primeros inmigrantes friulanos y vénetos a tierras de Caroya. Tiene tres metros de altura y su autor es el escultor Alfredo Negrito. El Intendente, en ese entonces, era Valentín Lauret.
En el espacio colocó mobiliario urbano y un cartel que da la bienvenida a todos los visitantes que llegan a Colonia Caroya.