El emprendimiento familiar se encuentra sobre el Camino Real cerca de San Pedro Norte y a 1000 mts de altura sobre el nivel del mar.
Comandada por el médico Alejandro Lozano junto a su hijo “Nacho”, ingeniero agrónomo, Del Gredal, la bodega más norteña de Córdoba, nace por iniciativa de los hermanos Lozano qué, proyectando tiempos de jubilación emprendieron de cero la elaboración de vinos.
Luego de un minucioso rastreo en busca de algún campo en el norte “limpio de papeles” y con la posibilidad que cuente con agua, los Lozano adquirieron 380 hectáreas al pie del Camino Real, y se iniciaron con cría de ganado, frutales y almendras. Luego llegó el momento de cosechar uvas y comenzar en el apasionante mundo del vino “Cuando implantamos la primera hectárea de nuestros viñedos nos propusimos un desafío: ninguna uva saldrá si no es transformada en vino. Con trabajo, perseverancia, superación, voluntad y amando los que hacemos, logramos dar vida a un sueño que parecía imposible” así comienza el relato de Alejandro “el turco” para Destino Córdoba:
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“Hace más de diez años nos embarcamos en esta aventura. Tuvimos una visión: hacer otro vino, de otra tierra. Así nació Bodega Del Gredal, nombre que hace referencia a las características del suelo donde se definen nuestros viñedos. Los lugareños conocen por tradición nuestro terruño como “La Greda”, suelos pedregosos, ricos en carbonato de calcio y otros minerales. Es en este suelo donde las raíces de nuestros viñedos extraen los nutrientes y le confieren a nuestros vinos sabores, colores y aromas únicos e irrepetibles”.
“Este es un emprendimiento familiar, pero no estamos solos. El equipo humano es lo prioritario, somos una fuente de trabajo en la región, donde cada uno pone lo mejor para el logro de los objetivos. El esmero en el cuidado del suelo y del ambiente, del fruto de nuestras plantas, y la delicadez en su manejo hacen que nuestro capital humano sea la esencia de nuestro proyecto”.
Así Del Gredal, se convierte en una experiencia imperdible, no solo por los relatos de sus dueños, sino también por una obsesiva manera de presentar productos genuinos de altísima calidad.
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